A mi Soledad ©

A mi Soledad ©

Uno a veces piensa y piensa
que los cantos dedicados a la Soledad ya son miles,
pues mucha gente de Ella escribe.
Lamentan verse acechados
se irritan al sentirse acosados.
Deambulan y hasta pueden caer en locuras.

Irónico es leerlos
irónico también es escucharlos.
¿Tanta molestia puede causarles
conocer a alguien nuevo en su vida
que en silencio acompaña
en silencio te arrima?

Pasan los problemas
como todo, solo en el principio.
Pasa como con nadie,
que reina la resistencia
a reconocer en esta nueva amiga
a quién acogerá tus alegrías y penas.

Pues hablaré de la mía
a quien nadie ha dedicado soneto alguno
por el simple hecho que es Mi Amiga.
Porque nos llevamos bien,
porque es parte de mi vida,
porque mi Soledad, es solo Mía.

La aprendí a conocer
desde pequeño jugando
y ya después, la terminé amando.
Mi Soledad no es de temer
pues en fiel compañera se ha transformado
ya sea esté solo ó bien acompañado.

A Mi Soledad tan bella
ya me he visto yo hasta celando.
Así que no me vengan con cosas
ni trucos para vernos separados.
A Mi Soledad la entiendo
así como ella sé, me seguirá acompañando.

La Soledad de ustedes
muy distinta no ha de ser
solo les falta conocerla bien
dejar de resistirse, aceptarla como es
ya sabrá ella cuando estés bien
ya sabrá ella cuando alejarse y dejarte ser.



::: Cristtoff WOLFtown © :::

La Historia de ¡Para Ya!

La Historia de ¡Para Ya!


Triste es la historia de ¡Para Ya!
con agrio sabor a injusticia quizá.

Para empezar su nombre era De Paz
y vivía feliz en su alegre hogar.

De joven obtuvo el DON de Una Vez
más su ego le jugó un serio reves.

Su DON de Reiteración no prosperó
y por su egoismo los sueños esfumó.

La Mala Suerte a su lado se instaló
instigándolo a blasfemar a un Dios.

De Paz, venias creyó estar cantando
pero Mala Suerte le había engañado.

Venias no eran, sinó mil blasfemias
y De Paz feliz cantaba sin saberlas.

Aquel Dios muy de cerca lo escuchó
más mucho fué lo que se encolerizó.

Así que llegando a su lado le indicó
gritando ¡Para Ya! desde hoy nombró.

Toda desdicha para ¡Para Ya! comenzó
y cada amigo y vecino se lo fustigó.

Fué exiliado y tratado como un ladrón,
cambiando la felicidad de toda una vida
por provocar a quien fuera su desdicha.

Así nació, así es ¡Para Ya!




::: Cristtoff WOLFtown © :::

Una Vez, Reiteración y ¡Para Ya !

Una Vez, Reiteración y ¡Para Ya !


Eránse Una Vez y su amiga Reiteración
jugaban alegres entonando una canción.

De memoria Una Vez citaba las estrofas
moviendo su cuerpo en compás armoniosa.

Reiteración se encargaba del estribillo
orgullosa manos arriba, ojos cristalinos.

Así la pasaban estas dos queridas amigas
sin discusiones entre ellas día tras día.



“Más no todo en la vida es siempre dicha
y les llegó la hora de romper su armonía”.



Esa tarde, Una Vez rondaba sus jardines
embeleciéndo rosas, tulipanes y jazmines.

A la misma hora, Reiteración se ocupaba
dando mimos y hablando al palo de agua.

Frente a la casa apareció de improviso
alquien que se les presentó como amigo.

Les había espiado a ambas impresionado
por sus bellezas y su jardín tan cuidado.



Aquel tipo saboreó sus nuevas carnadas,
y dió unos pasos adelante con prestancia.

Dos bellas y poco precavidas damiselas
a quienes nublar el día e infeliz verlas.

Una Vez sonrojada ante sus adulaciones
sus dulces palabras evocaban amores.

Reiteración no paraba en su coquetería
y guiño tras guiño al extraño perseguía.

Resultó ser ¡Para Ya! este desconocido
huraño demente, infeliz y sin buen juicio.

Cuando ¡Para Ya! las vió tan entregadas,
cual arpía sanguijuela sacó sus garras.

Una Vez cayó desangrada sin más llanto.
Reiteración su agonía frenar no lograba.

Atacadas sin contemplación y sin espanto
por el desconocido amigo que las halagaba.

Había vivido de Pueblos siempre expulsado
más hoy deliraba con jardín en nueva casa.

Bella Reiteración su canto finalmente calló
y la armonía de Una Vez simplemente murió.



….de la historia de ¡Para Ya!, ya sabrán..



::: Cristtoff WOLFtown © :::