Disfruto de esta bella Vida, pregonando su simpleza y aferrándome a Ella cada día, tanto de ésta como de las que he pasado y de las que, seguramente seguiré viviendo..pues hay un alma en pena y un cuerpo vagando juntos sin intenciones de dejarla aun.

Tocan y se van

Tocan y se van


Tocan a la puerta. Justo ahora en que intencionaba la no paz que requiero para sentarme a escribir bosquejos, repasar borradores y finalmente desecharlos todos y salir con algo totalmente nuevo.

Tocan. Tocan con premura. Han de ser seguramente los madrugadores enviados de Dios ¿Elmer se llaman todos? Creo que sí. Sin conciencia alguna siempre se atreven a pedir audiencia los domingos en la mañana; ¡sean las 7 o las ocho y media!

Bajo. Sí, deben ser ellos. Hecho un ojo por la ventana y ¡Sorpresa, hoy el santísimo se acordó de mí; mandó misioneras! ¡Y de las más bellas!

Bueno teclado, habrás de esperar como ya estás acostumbrado. Tu seudo-escribiente al parecer será abducido y con regocijo escuchará aquellos evangelios de memoria que, más que convertir, esperan encandilarte y con ello tu alma atrapar para la causa de un Dios que, vaya el mismo demonio, al parecer no es el mismo de todos los otros.

Omito atenderles por el citófono adrede, pues pretendo ver de cerca aquellos ojitos celestes o pardos de sus celestiales emisarias.

Quiero ver si resistirán un saludo cordial y cortés antes que digan nada. Será un beso en sus mejillas y una risa de picardía, sabiendo que de aquello no acostumbran y es mas, rehúsan izando apretones de manos distantes antes que puedas hacer nada.

Abro la puerta. -¡Hola Hermanas!- alcancé a pronunciar, pero ya no estaban…

¿Habrá sido algún chiquillo de mierda tocando los timbres de madrugada esperando cagarse a quienes aun estuvieran dormitando? Hoy yo no lo estaba, somnoliento me levanté temprano y en darle buena causa a borradores pensaba, pero me han mandado cualquier idea al infierno, tras haber tenido tamaña aparición por la ventana y donde aquellas gringas, siempre sonrientes Hermanas….ya no estaban.

Tocan ala puerta otra vez, y volveré a mi cama ¡Si podría estar durmiendo y hechado todo lo que queda de mañana!



::: Cristtoff WOLFtown © :::

El Gran CopyPast

El Gran CopyPast


El Gran CopyPast
no es sino más que un mago callejero e inusual.

Sabía y así solía
con mil y un juegos a la audiencia popular deleitar.

Toma su sombrero
y ¡zzzasss! CopyPast sin varita ¡aparece un conejo!

Los niños vitorean
y flores por doquier le dedican todas las damicelas.

Hombres, ceñudos
solo limitan su aplauso; esto no es el mejor número.

Estará unos días
pretendiendo deslumbrar toda mujer no tan niña.

CopyPast, cuidado
acá la vida y ley no son para Don Juanes mimados.

El Gran CopyPast
temprano ha sido expulsado de la Aldea por galán.

La ira contenida
desatas en un Pueblo donde la mujer es protegida.

Los hombres, rudos
defienden a punta de rojas espadas lo que es suyo.


CopyPast no está.
Copiaron su número, pegaron su suerte al mas allá.
Dícese exiliado y muda verdad; no descansa en paz.




::: Cristtoff WOLFtown © :::

¿Interrumpo algo?

¿Interrumpo algo?


Vamos por parte, dijo Jack y comienza desde el principio a contarme.

Pero si me tienes con tu historia mas enredado que pelea de culebras.

En plena celebración de vacaciones estabas y, algo salió de la nada.

No desistas. Cuéntame el final de tu espeluznante e interrumpida trama.

No interrumpo más. Sí te creo, dijo el ateo. ¿Dónde estás? dijo el ciego.

¡Dime que ya te fuiste! le dijo la chica en la primera cita al quinceañero.

Me saliste sentimental, compadre. Lo siento, dicen por decir en los velorios.

Hugo, no me vengas denuevo a contar tus cuentos, le dijeron al contador.

La pérdida de tiempo el de estar escuchando para que se vayan enfadados.

¿Acaso uno tiene que callar, no reir de nada y escuchar sin interrupciones?

¡Vaya vida! Llena de serios y graves. ¡Así qué gusto dá escuchar enfermos?!





::: Cristtoff WOLFtown © :::

De lo no mío, ni mía

De lo no mío, ni mía


Un día cualquiera terminando las tareas
exhausto emprendo retiro
a la casa que no es mi casa,
a ver la familia que fue mía,
seguir la vida que no es mía.


Es fácil vivir la felicidad ficticia con penas
cansado, sí ya me he visto
vivo la vida mía ajustada
procuro entregar alegría
aun sin tener la mujer mía.


Un día cualquiera me largo sin despedida.
Exhausto me lanzaré al río
el río de vida tampoco mío
a retomar las fuerzas mías
nadando por la amada mía.





::: Cristtoff WOLFtown © :::

Renuncio a mí mismo

Renuncio a mí mismo


Renuncio, renuncio con toda mi voluntad
con plena conciencia y toda mi facultad
a todo deseo,
a toda mirada
a eso de buscar y encontrar, sin buscar.


A dar vanamente sin sentido e igual dar.


Renuncio desde ya poniendo en la balanza
mi alma, alguna vez corrupta de andanzas
mis manos,
mis miedos
a mis bohemias locuras nunca muy sanas.


Al amar sin amar sin sentido e igual amar.


Renuncio a mi mismo
por un bien tardío
una locura mayor
buen sacrificio
un futuro mejor
da lo mismo
renuncio!





::: Cristtoff WOLFtown © :::